Quiero que me tengas confianza.”, escucho a muchos padres de familia decirles a sus hijos, y a muchos jóvenes exigirles a sus padres cuando existen problemas en la relación. Sin embargo, en la medida en la que uno comprende la naturaleza de la confianza, es más fácil darse cuenta que ésta es algo que no se puede forzar, sino que más bien es el resultado y el fruto de la manera en la que ambos lados de la relación interactúan.
Gottman, uno de los líderes mundiales en la investigación de las relaciones humanas, quien estudió a las parejas durante 30 años en un laboratorio y que a través de sus investigaciones lograba identificar con un 95% de precisión qué parejas permanecerían unidas durante los siguientes cuatro años y qué parejas se separarían, afirmaba que la confianza es un elemento que no se puede forzar en una relación. El decía que más bien es el resultado de nutrir la interacción con ciertos elementos clave. Tal como no se puede forzar a que una planta de frutos en el instante en el que nosotros queremos, sino que más bien tenemos que darle a la planta nutrientes y elementos que ésta requiere para que un buen día aparezca un fruto.
La confianza funciona de la misma manera, pero en el caso de los seres humanos no es agua, tierra o sol lo que necesitamos para que aparezca el fruto de la confianza con nuestros hijos, nuestra pareja o cualquier persona que forme parte de nuestra vida. Es decir, la confianza es el resultado natural de ser responsables con los compromisos de una relación, de ser honestos en todo momento con lo que decimos y por supuesto, de actuar con respeto, amabilidad y paciencia.
Por eso, más que exigirles a las personas que nos tengan confianza, lo más sensato es preguntarnos si en los últimos meses hemos tratado a nuestros seres queridos con respeto y amabilidad, si hemos cumplido con los compromisos de la relación, si reconocemos nuestros errores al equivocarnos y reparamos el daño, si hemos sido honestos. Si tu respuesta es afirmativa, es posible que el fruto de la confianza ya esté en esa relación, si tu respuesta es no, o que falta trabajar algunas áreas, es posible que tengas que esperar para que la persona experimente sentimientos de confianza cuando está contigo.
